miércoles, 5 de octubre de 2016

Súper Ari.

La mujer chunga en el barrio, foto por Julio Bravo.



Desde Gerona para México.

por Julio Bravo.


Por mi boca hablará el ruido, el tiempo, de entre jirones contaré que la conozco, la conocí y de la constancia de escucharle, coincidimos. Es Arianna, gancho perfecto del Hip-Hop, y en España de sus amores repechó su estrellato. Hoy ganará un Grammy; hoy, la masa de nuevos escuchas sabrá sobre ella, donde ahora está, tan cercana a la cúspide; reventarán de sonido Rap su casa con coros y rimas sin igual.

Arianna Puello, foto por Julio Bravo.
El lugar que recibió a la rimadora que te atrapa por el cuello, fue el Soul Dread, ubicado en el Estado de México; ahí donde el Reggae se difunde, ahí, donde el Rap también encuentra su sonoridad, sus localismos del decir, los que venimos del barrio. Entre calles y avenidas, gasolineras sucias y carriles grises. Centros y garitos como dicen en el otro lado del sol que amanece como un toro violento, Ari Puello convocó a su público, los reunió en un sitio lúgubre que consume cartones de cerveza; con una fauna que se comporta como un gorila, aquellas almas fieles que le siguen desde sus inicios, que se saben bien a bien sus letras: que ríen para no llorar, que lo primero es conseguir dinero y evaluar sobre la Ley de Murphy.


La reina del mambo, foto por Julio Bravo.

Muy de temprano comenzó el evento, una lista de teloneros hizo las delicias de la tarde que hervía por admirar a la estrella que Gerona miró crecer y concretarse como la rapera consolidada del fenómeno Rap en España. Hablar de Ari es hablar de peñita bombos y cajones; de un Meswy interpretado por un viejo lobo de mar, que le dio el micro a esa mujer chunga y desde entonces no cesa de versar con acento y forma. Frank T es de sus viejos amigos, Nach y tantos otros que compartieron con la imperiosa agua cristalina de las rimas poderosas de Arianna Puello. Voces y rimas acaloraban el lugar, exponentes nuevos y otros no tanto; gente que rima en los vagones del metro, leyendas del underground como uno de los integrantes de Petate Funky y un micro abierto que levantó más que sorpresas, entretenían a un público con ínfulas de beodos; con un humo constante en una suerte de verde coral que ascendía al cielo. Así acaeció el día; un domingo cualquiera para los amantes del Hip-Hop se transformó en una fiesta callejera. Poco a poco desde el inicio del concierto hasta su punto final, el lugar se fue llenando de manos arriba, gritos y emociones que iban con ganas de disfrutar a la reina del mambo.

Ari súper estrella. Foto por Julio Bravo.

Esta maravillosa buscavida de las letras de asfalto, nos regaló canciones históricas de su carrera, puso a vibrar y a saltar a todo mundo. Todos escuchaban lo que traía, y todo mundo conforme, pues aquella artista se entrega, suda y canta. La preparación y la experiencia que Puello nos revela, engrandece su personalidad explosiva. Es única, esta rapera que nació con sangre y acento del Caribe, es una negra hermosa, madura y siempre entregada a sus fans. Ninguno quedó insatisfecho y por un instante, cada uno de los presentes entendió que Arianna Puello sigue pegando fuerte, con el puño en alto y la voz y las palabras como su mejor trabajo de vida.


La negrita de República Dominicana. Foto por Julio Bravo.