Proyecto Luana, foto por Julio Bravo. |
Algo de jazz, siempre algo más.
Por la paz las voces corean unidas y graves; puños multicolores se alzan, las masas caminan vestidas de blanco…, “todo en nombre de la paz puede ser grandioso”. No deseo crear polémica, pero, no será esa paz una mera enajenación, un apoyo con pilón. Es decir que aquello se realiza por obtener una ganancia, por algo cualquiera. Los conciertos masivos por la paz, donde las donaciones abundan; el alma caritativa de cada persona se enjuga de sudor y lagrimas. Yo considero que sólo por el hecho de ser televisado y patrocinado por grandes consorcios comerciales, las personas acuden demostrándole al mundo su dadivosa generosidad. En otras ocasiones únicamente están ahí para que se diga que ellos son, gente que se anexa a la causa.
Alberto: sax soprano, Edne: sax tenor, foto Julio Bravo. |
He oído decir, hablar, que los actos artísticos en algunos países tienen audiencias de cientos y miles de personas. Algunos afirman que en Cuba los foros y teatros se abarrotan cuando realizan presentaciones de libros. En Rusia la poesía en la voz del poeta o sus poetas, se dice que llena estadios. Cosas así suceden en los países donde su población, preocupada, adquiere una concientización de que educar y ser educados es, un trabajo diario.
María: sax alto, Antonio: sax baritono, foto por Julio Bravo. |
Ahora, la verdad no debe de callarse, y es de bastante lastima, cuando uno mismo se da cuenta de que en nuestro país la cultura, el arte, la música…, no tiene mayor importancia. Incluso cuando un concierto se supone realizado en nombre de la “paz”, (como esas estúpidas guerras donde millones de soldados aniquilan a otros), la audiencia convocada sólo sea de unos pocos. Un refrán callejero dice: “pocos pero locos”. Eso éramos quizá, los que nos encontrábamos esperando a la gran y original banda Proyecto Luana, una banda que a través de la amistad han desarrollado un concepto nuevo; su arte sonoro lo basan en el jazz contemporáneo, con el fundamento desde una creación académica, que no sólo desea llevar su sonido por lo ortodoxo, sino e igual dirigirlo hacia una musicalización mucho más libre. Los motores de la banda se mantienen sobre los instrumentos de viento, en un principio el ensamble se pensó como un simple cuarteto de saxofones; con el paso del tiempo los demás integrantes, reordenarían y reformarían su sonoridad actual. Hoy Proyecto Luana se conjuga en una versatilidad impecable, acompañados por la batería, el contrabajo y las percusiones menores, las texturas y cambios obtenidos, transportan al oyente de un sonido latino a uno soul; y demás sonidos que embelesen en una paz que sólo atenta hacia la felicidad, en pocas palabras el jazz/fusión.
Carlos: contrabajo, Pakete: congas, foto por Julio Bravo. |
La tocada por la paz, efectuada en el pasado mes de septiembre en el Centro Universitario Cultural nos encantó con éste ensamble nacional que se encuentra dando a conocer su proyecto, ellos han estado en varios clubes famosos, en festivales del Distrito Federal y, en medios de difusión como el IMER y el programa de televisión El Tímpano, por mencionar algunos. Esperemos que el tiempo y la sociedad los coloque donde deben de estar, para que sus tocadas en el nombre en que se lleven a cabo, terminen infestadas de seguidores ávidos de escuchar su buena música.
Que sirva de reflexión que si no nos comprometemos a orientar nuestros oídos a lo reciente, a lo nacional, jamás seremos capaces de ser nosotros mismos. Visitemos más nuestra música, acudamos a los museos, consumamos arte.
Rive: batería, foto por Julio Bravo. |