lunes, 31 de diciembre de 2012

Mala María.

Tiene el trato, foto por Julio Bravo.


Purificada maldad. 

por Julio Bravo
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De España para el mundo… La Mala María. Considero que si algún día la premonición actuara en uno, como un aviso para mitificar. Desde el primer momento; sobre la imagen de María un relato con desbordes fantásticos se hubiera escrito. No obstante, algo existe hoy en día para ir revalorando el arte y la personalidad de un ser fuera de serie. El tiempo parece más justo en éste siglo, y los días de no admirar, no comprender y no respetar el “el divino o maldecido” trabajo del artista sensible va disminuyendo. Comienzo así por que creo en la falta de una buena memoria, de una buena crítica y de un buen argumento. También por la tristeza y la ignominia, que en ocasiones el ser humano provoca contra otros, sírvase para ejemplo, nombrar casos de escritores repudiados, músicos incomprendidos, actores secuestrados; en un sinfín de atrocidades mayores que sojuzgaban el humilde cuello del genio artístico, no hace falta escribir sus nombres, finalmente algunos de ellos, hoy gozan de justicia. Pero la tarea del biógrafo, del entrevistador, del investigador, permite enfrentar y reconocer al personaje que hace y hará historia.


La sílfide tornasol, foto por Julio Bravo.
“Los artistas somos un cúmulo de influencias.” Esto afirmaría La Mala Rodríguez en una lejana entrevista en sus inicios, en la revista española Hip Hop Nation. Trece años y las calles pintadas, la movida del barrio sevillano, bloques y parques emitiendo lenguajes; en la rápida articulación de la palabra terminada en rima. La pequeña María escuchaba el rap de su entorno callejero, quizá en la intimidad justamente; la hoguera de sus sueños de alcoba, aunados a la otra música –el flamenco y la canción de protesta latinoamericana- debían permear en su imaginación lo que La Mala comenzaría a escribir después. Un heraldo nocturno grazno sobre la cabeza de la adolescente María, el Cuervo es un personaje clave en la aventura artística de La Mala. El aleteo sonoro del pájaro negro y las primeras maquetas, el error como conocimiento del fallo para entender la enseñanza del primer vuelo. Como buena andaluza María decidió entregarse a la mar; aquella tendida sabana de rupias verdes, abordó el barco pirata de Espronceda y Góngora, viejos marineros transfigurados en SFDK Y La Gota que Colma, ofreciéndole el ron añejo de sus barricas reales. Éstas fueron algunas de sus primeras colaboraciones que le darían respeto, un micrófono para soltar la rabia como una arpía que pasara una temporada en el infierno. La furtiva leona que con viento en popa, sudorosa como una perra escupiera el alarido “Por mi madre que hoy, se escucha el canto de victoria.”  


Sirena ultramarina, foto por Julio Bravo.

El misterioso duende de pies colgando en el cuerno de la luna, le instiga, la convence y trepada en sus orejas le silba a María su genio rebelde. Siempre realizando las cosas a su manera y su forma La Mala reinterpreta su estilo directo de crear su rap. Busca la manera de decir las cosas, lo que siente, no tambalea. En el mundo musical de María los versos pueden escucharse muy despacito, como cuando entre la basura se busca el derecho que todos merecemos tener. Pero si grita, lo hace por dejarse caer, por dejarse querer, porque sabe, exige del otro la transparencia, cuando uno mismo es una fiera no se tiene nada que perder y la sangre nos da tirones para pedir la verdad.



El hada verde, foto por Julio Bravo.
“Lo mejor de la música es el “aroma” que te deja después de escucharla.” La cocinera de nuestros mejores platos, La Mala cocina con especias y especies, sazona su comida sobresalientemente. Con mucho potaje nos alimenta, sabiendo que lo fácil cae ligero. El malamarismo de La Mala Rodríguez; de una híbrida mujer lagarto dotada de un oído y un ojo, incisivamente critico, fluyen en el proceso de su creación, entiende que en base de respeto y la confianza con sus colaboradores fraguará un disco completo, que le guste a ella y a su público. La dinámica de La Mala en cada entrega de su material es distinta, otorgando a cada tema de una redondez poco escuchada en otros raperos, asumo que sus canciones son un boom en cada grabación, y es difícil poder decir que, sólo te gustaron tres temas de todos los demás. La sustancia mágica que la bruja bella vierte en sus rimas, es una fuerza que embiste contra todo límite.


Terroríficamente malvada, foto por Julio Bravo.
“Ya estoy metida en la industria, ya no sólo en el arte del Hip Hop. Se trata de vender arte.” Precisamente coincido con lo que dice la Mala María, lo que ella realiza es arte y lo va evolucionando. La sucia bailarina es un recurso al mero estilo literario, La Mala inventa un personaje que parece venir de su familia, una nieta futurista que expresa lo que vive su mundo. Las letras de María por medio de la bailarina se cargan de un contenido lírico,  poético y social. Un corazón que por fin dialoga con la razón para no sufrir más. Una filosofía en un ambiente que distingue a La Mala de los productos comerciales de Universal… se cristaliza en, si no vas a lamentar nada, ¡no pidas perdón! 

Así, la reina del rap en español conquista legiones de seguidores, la Mala María trasmuta su arte, puede mirársele en mil personificaciones, un efecto dionisíaco parece revestirle la piel, y la más mala de todas establece su reinado. 

La mala muy buena, foto por Julio Bravo.
         

martes, 25 de diciembre de 2012

Periodismo Cultural.

Javier Aranda Luna, foto por Julio Bravo.



Destinados a creer en la historia. 

por Julio Bravo. 

Aquello que vive feliz en la memoria, es lo que siempre vale la pena resguardar, recordarlo. Lo que quiebra la brevedad del instante y en solida forma termina conquistando un tiempo infinito. Pero también lo que no vale, es pertinente recordarlo. El despojo no sirve de nada, sin antes haber localizado su falta de valor. Lo inesperado tenemos que esperarlo, el tener los ojos abiertos, nunca es indicio estable de que estaremos ahí para presenciar el hecho que hará historia, a veces caminar con un delgado velo en el rostro, nos permitirá vislumbrar algo que no es visto por otros, causará su gran revelación.


La mesa y los participantes, foto por Julio Bravo.
Así, ha llegado como fatalidad o fortuna a mis manos un libro que despierta la causalidad, o debería afirmar seguramente, la justificación. Como llegara la providencia a las puertas de Jerusalén, llegó a mí el primer tomo de México: 200 años de periodismo cultural, las circunstancias ante esto, siempre aparecen misteriosas. Una generosa maquina del tiempo; un inmenso logro de la evolución es el libro. Partamos del azar: en la pasada feria del libro del zócalo, en el Tercer Coloquio Hispanoamericano de Periodismo Cultural del Zócalo se ofreció al público presente, el estado de salud del periodismo cultural en el país. Gracias a esto conseguí las dos memorias pasadas, que son las participaciones escritas de los ponentes, en las que formulan sus ideas y sus opiniones acerca del tema en cuestión.

La alegre labor de cada día, foto por Julio Bravo.
No pretendo asumirme como un fotoreportero, un periodista, un crítico. Lo que creo es que sólo soy un simple poeta que vive una larga sequía La realidad es que ahora mismo, me es difícil congregar las ideas, para generan un texto agradable y justo para los lectores. Confirmo que al terminar las lecturas de estos meses, he caído en la cuenta de que tengo muchas afinidades con algunos escritores y periodistas. Que al relatar sus experiencias, me he visto en similares situaciones, abogo por las mismas faltas de seriedad y de carencia de los que día con día buscan la nota cultural. 

Escuchando a la gente, foto por Julio Bravo.
Entremos en reflexión, si bien espacios y suplementos se reducen constantemente. Los periódicos fusionan secciones de cultura con secciones de espectáculos. Programas de radio como En Busca del Cuento Perdido con Sandra Lorenzano, transmitido por el IMER junto con la Universidad del Claustro de sor Juana cuenta con escasos veinticinco minutos de literatura que se transforman en un suspiro, en televisión Retomando a: con Javier Aranda Luna, donde predominan retransmisiones de programas culturales del pasado, en pos de reformular sus contenidos, con su única aparición sabatina de capítulos seriados, y por si fuera poco, transmitido diariamente por Foro tv a las dos quince de la madrugada, es de esperar que cada vez se aprecie menos interés en la labor artística entre la población. No es bueno, asumir el estigma de que este tipo de información no les llegue, no sepan cómo buscarla, o pasen por ella sin darse cuenta, no. Es porque, lo que nosotros generamos no es de interés suyo, nadie es culpable, pero sí podemos hacer algo al respecto. En ocasiones olvidamos lo más básico, que es, invertir actos en ganar la confianza del público, hacerles sentirse parte de lo que nosotros difundimos y disfrutamos. Ahora es cuando no deben existir limites, la imaginación debe ser puesta como primer obligación para construir un texto llamativo; en cualquier representación artística es necesario asumir que la imaginación debe de imperar, la astucia con inteligencia en todo contenido logrará que algo se convierta en historia. Contar una buena historia es importante para el escritor como para el lector, no es bueno subestimar a los demás, ni a sí mismo, se escribe para uno como se escribe para todos, siendo reales.  

                                                  Somos memoria, foto por Julio Bravo.

La estabilidad de la cultura depende de los comunicadores y los creadores, unir la fuerza de trabajo con el alma que es el público, para hacerles llegar la nota, el artículo, la reseña, la fotografía y todas esas cosas que sí esperan ver, ya sea impreso o por la red, lo significativo es estar ahí. Y qué más da, si somos de a pie, el hallazgo está claro y no se encuentra en un mundo cerrado, para encontrarlo basta con andar tras él, ser variables, buenos observadores es lo preciso. Como si se fuera un cazador de la cultura. La memoria se preserva cuando ha sido bien documentada. 
La importante opinión de los otros, foto por Julio Bravo.

miércoles, 12 de diciembre de 2012

La bomba sonica

Él es Hytec, foto por Julio Bravo.


La revolución del sonido. 

Por Julio Bravo.


Está ahí el instante, como una grabación que sintetizó el acontecimiento, y hoy… ha tomado la medición de los minutos. Todo se transformo en la revolución de las ondas sonoras, salpicando líneas a los ojos que nos manchan; pincel que nos ensuciará con delgados trazos de pintura. En los oídos se convocan truenos galácticos, algunos planetas circulan por la cara; generando distorsiones que estallan en el interior de nuestra cabeza. A veces creemos presenciar el renacimiento del cosmos.

Con más fuerza, foto por Julio Bravo.
La mañana se esparció en una nube de polvo, y aunque continuábamos caminando en su contra, parecía decisión del viento frenarnos para siempre. Todo esto es un fragmento de las vivencias de secundaria, por aquí, se podría comenzar a discernir entre la exageración y la mala nostalgia del recuerdo, con cercano parentesco en el mito, pero no. Existen circunstancias en la vida que se viven de manera muy, muy extraña. Aquel día el irse de pinta, parecía fatal, entonces la música actuó por su cuenta. Finalmente Roberto nos había convencido de ir a la casa de su tío  el solterón.

Ella es Copycat, foto por Julio Bravo.
No puedo hablar por los demás, ignoro cómo lo hayan tomado mis otros tres compañeros de salón, yo sin duda descubrí otro mundo en el mío. Para mi segundo año de secundaria, era sorprendente admirar que en mi país un hombre soltero viviera tan bien, como el tío de Roberto lo aparentaba, Era como si un ciudadano de Nueva York hubiera trasladado el departamento completo aquí en México. Su sala moderna y muy masculina, no le di gran interés, su recamara el único atractivo para nuestro grupito de adolescentes sin dinero. Y abracadabra el magnetismo del siglo XXI, que estaba por llegar nos atrajo a él. La PlayStation nos devoró por completo con Winning Eleven 4 elaborado por Konami, la verdad todo aquel que se enfrentaba a mí, terminaba derrotado, así que opté por dejarlos jugar sin que me odiaran por eso. La realidad es que yo quedé fascinado por el estilo del tío, me gustó su calzado deportivo, sus camisas y pantalones; las revistas y libros que se encontraban en su sitio, existía ahí, la huella de un hombre sofisticado que despuntaba en órdenes que desconocía. Fui tragado por la curiosidad del porta cd’s y quedé prendado. ¿Qué música era aquella, de rostros jamás vistos?, continúe revisando; nombres y caras como el bombardeo de Pearl Harbor por el hecho de encontrarme aún dormido, y lo sé los reyes del techno, del house, trance y progressive… Carl Cox, John Digweed, Paul Oakenfold, Green Velvet y los demás se me han olvidado, pronto acudí al minireproductor coloqué a Paul y bailamos toda la mañana fuera de clases, por la ventana ya entraba un claridad amarilla, que calentaba los corazones de la juventud verdaderamente extasiada.

Y la mujer representa, foto por Julio Bravo.
Así es cómo el pasado interviene con el futuro, siempre dependiendo del presente, la música electrónica sigue su curso, su acción mutante regenera el sonido. El Drum & Bass nos acecha con las mil fauces sónicas que tiene, Konami y el electro vuelven a aparecer en mi vida. El quinto aniversario de Konami Crew en el Salón Bach lo confirman. Éste colectivo audiovisual fundado en septiembre de 2007, aparece en la escena electrónica de México, trabajan desde el underground para ofrecer al público entre Dj’s y Vj’s, un trabajo en conjunto. Deseando crear, en una justa dimensión, un terreno donde el audio y lo visual mantenga al oyente posicionado en un fenómeno que configure la experiencia audiovisual en todos los sentidos. Considero que lo han logrado, en la medida en que las combinaciones de las imágenes, se deslizan igualmente con los sonidos, la provocación es inmediata y pocos son los que terminan sentados sin mover nada el cuerpo.

Él es Redeker, foto por Julio Bravo.
El Drum & Bass va ganado fuerza conforme la tecnología ofrece también más recursos para generar audio, las corrientes y subgéneros salen poco a poco. La revolución de la música es ahora, es siempre. 

Conexión audiovisual, foto por Julio Bravo.




 

martes, 20 de noviembre de 2012

La tabla rodante.

Skate en CCH Azcapotzalco, foto por Julio Bravo.


Ruedas, trucos y asfalto. 

Por Julio Bravo. 

Aún no se acuñaba bien el nombre por aquellos tiempos, pero ya se tenía a medias, una noción del movimiento. Una temporada donde tribus urbanas coincidían en las calles poco a poco, todavía había estragos de los legendarios ochentas, en donde rockeros, punks y góticos se resistían a desocupar por un momento las calles para abrir paso a otras generaciones, con otras ideas y formas de vestir.
De panza en el tubo, foto por Julio Bravo.
Los skates en México ya contaban con algo de historia ¿cómo fue que llegaron?, no lo sé; quizá fue MTV que ya había causado sus estragos en los jóvenes de Latinoamérica; quizá algún primo de un amigo, visito Norteamérica observó patinar a unos chicos en Los Ángeles y compró una patineta, las especulaciones pueden ser tantas. Lo importante es que así se fundo un arte sobre ruedas, algo de lo más urbano que puede realizarse en una ciudad que lo ofrece todo para el patinador de hoy en día. El surf de los años 60 tomó la forma del concreto, las olas se trocaron en banquetas, la evolución de unos chicos bronceados cansados de terminar salados bajo el sol, decidieron tomar su tabla, ajustándola para el futuro.

Saltando las escaleras al vacío, foto por Julio Bravo.
Recuerdo que las marcas que existían por el país, eran Powell Peralta, para 1987 ya contaba México con su primera tienda dedicada a los patinadores el JaySkate. Aunque para ese tiempo el saketeboarding no contaba con la fuerza suficiente de más tarde. Entrados los noventa confirmaría el legado de los reyes del asfalto, la música y los videojuegos darían al skate su victoria, no hay duda que el auge de la cultura urbana de manera fusionada, permitiría que el curso de las tablas rodantes tomara su camino de realeza, todo parecía fundirse de manera muy rara, pero no podemos dejar de afirmar que así fue. El rap de 2 Live Crew, Mc Hammer, Public Enemy, Snoop Dog, 2pac, Afrika Bambaataa, Run DMC, sólo por nombrar algunos, la otra cara de la moneda se cernía sobre otra oleada de música alternativa como: Nirvana, Red Hot Chili Peppers, Bob Marley, The Clash, Sex Pistols, Pantera, todo esto le daría un lenguaje y una forma de ser. En los videojuegos no podía faltar un nombre legendario Tony Hawk para el cual Neversoft junto con Activision desarrollaron la plataforma para varías consolas del mercado, una de ellas el Playstation, los apasionados de la tabla, ya podíamos gozar de los grandes ídolos de lo que ya era un deporte mundial, las marcas pululaban para entonces y se soñaba con comprarse unos tenis DC, una gorra DVS, y por qué no una playera Osiris. Una pieza cumbre en el desarrollo de esta empresa del skateboarding en México fue, el grafiti, popularizó aún más al skate, ya se podía ver por las calles a un chico de la secundaria con su pantalón gris a cuadros, con su suéter verde haciendo ruido de latas en su mochila a toda velocidad saltando banquetas y charcos en su patineta. 

Lo demás se va escribiendo y hoy el skate tiene su lugar ganado.

50 50, un truco limpio y bien ejecutado, foto por Julio Bravo.

lunes, 5 de noviembre de 2012

Todo te lloramos Chavela.

El homenaje de Chavela, foto por Julio Bravo.
 La muerte cumple años. 

Por Julio Bravo. 

Ponme la mano aquí Macorina, ponme la mano aquí… y ahí, justo en el corazón, la mano de Chavela se posa, nos atrapa. Ella la chamana, la poetisa, La Dama del Poncho Rojo, entró en casa llena. Aunque rechazada por un tiempo, con un éxito internacional en París  en Madrid, Chavela Vargas supo reponerse, combatir, finalmente México la consideraría suya. Qué no sufrió la llorona, pobre por mucho tiempo, parrandera y apasionada. Descubrió el alma verdadera de la mexicanidad, quizá por eso el pueblo no le daba su lugar de honor; quizá el estúpido ego de las masas y de las minorías, los hizo enfadar y no apreciaron lo que Chavela nos tenía para todos. Una hermosa mujer de Costa Rica era más mexicana que todas. Chavela entendió cómo cantar y hasta que beber, nada le falto, le sobraba valor, honestidad. Conquistando a viejos y jóvenes, no tendría que utilizar recursos, como mencionar en una canción, la bebida más famosa del país, o salir como una mujer, montada en un caballo dueña de una enorme hacienda en una vil novela. No, Chavela intentó lo imposible, ser naturalmente mexicana, se adaptó cada día, conoció la necesidad de la calle, probó la mínima suerte del artista.
La María Tepozteca, foto: archivo.

Murió un domingo cualquiera, ella misma lo predijo. La muerte siempre nos ofrece una lección sencilla, al ser humano debemos valorarlo todos los días, y al artista por igual como al ser amado. Si da un concierto y nos gusta, asistir es deber, si un homenaje se le rinde, hacerlo en vida es lo mejor, después ya para qué. La María Tepozteca falleció el 5 de agosto en Cuernavaca, para el día 6 un lunes en Garibaldi nuestras botellas fueron alzadas, los cantos no serían sordos, y le gritábamos a Chavela en su ataúd para que se levantara, para beber juntos la última copa.
Despedida en Garibaldi, foto por Julio Bravo.

Ante la muerte poco se puede opinar, la muerte nos rebana por completo. Lo que queda es el recuerdo, Chavela nos dice con lenguaje franco y amoroso, “yo quiero qué la gente me recuerde como una vieja loca y borracha” Qué no hacía Chavelita en esos estados, vivía el sueño, la noche entre mujeres y amigos, despertaba con el día, cantaba y bebía; el dolor y la pena eran magia, transmutaba su fragilidad en las canciones por una entereza descomunal. 

Chavela plateada, de oscuros ojos, enérgico clamor de voces, versos empotrados en las agallas del alcohol. Chavela y Lorca, luna en el reflejo del lago, siempre luna, siempre tú.

Adiós Chavela plateada, foto por Julio Bravo

lunes, 8 de octubre de 2012

Luana por la paz.

Proyecto Luana, foto por Julio Bravo.

Algo de jazz, siempre algo más.

Por Julio Bravo.

Por la paz las voces corean unidas y graves; puños multicolores se alzan, las masas caminan vestidas de blanco…, “todo en nombre de la paz puede ser grandioso”. No deseo crear polémica, pero, no será esa paz una mera enajenación, un apoyo con pilón. Es decir que aquello se realiza por obtener una ganancia, por algo cualquiera. Los conciertos masivos por la paz, donde las donaciones abundan; el alma caritativa de cada persona se enjuga de sudor y lagrimas. Yo considero que sólo por el hecho de ser televisado y patrocinado por grandes consorcios comerciales, las personas acuden demostrándole al mundo su dadivosa generosidad. En otras ocasiones únicamente están ahí para que se diga que ellos son, gente que se anexa a la causa.

Alberto: sax soprano, Edne: sax tenor, foto Julio Bravo.
He oído decir, hablar, que los actos artísticos en algunos países tienen audiencias de cientos y miles de personas. Algunos afirman que en Cuba los foros y teatros se abarrotan cuando realizan presentaciones de libros. En Rusia la poesía en la voz del poeta o sus poetas, se dice que llena estadios. Cosas así suceden en los países donde su población, preocupada, adquiere una concientización de que educar y ser educados es, un trabajo diario.

María: sax alto, Antonio: sax baritono, foto por Julio Bravo.
Ahora, la verdad no debe de callarse, y es de bastante lastima, cuando uno mismo se da cuenta de que en nuestro país la cultura, el arte, la música…, no tiene mayor importancia. Incluso cuando un concierto se supone realizado en nombre de la “paz”, (como esas estúpidas guerras donde millones de soldados aniquilan a otros), la audiencia convocada sólo sea de unos pocos. Un refrán callejero dice: “pocos pero locos”. Eso éramos quizá, los que nos encontrábamos esperando a la gran y original banda Proyecto Luana, una banda que a través de la amistad han desarrollado un concepto nuevo; su arte sonoro lo basan en el jazz contemporáneo, con el fundamento desde una creación académica, que no sólo desea llevar su sonido por lo ortodoxo, sino e igual dirigirlo hacia una musicalización mucho más libre. Los motores de la banda se mantienen sobre los instrumentos de viento, en un principio el ensamble se pensó como un simple cuarteto de saxofones; con el paso del tiempo los demás integrantes, reordenarían y reformarían su sonoridad actual. Hoy Proyecto Luana se conjuga en una versatilidad impecable, acompañados por la batería, el contrabajo y las percusiones menores, las texturas y cambios obtenidos, transportan al oyente de un sonido latino a uno soul; y demás sonidos que embelesen en una paz que sólo atenta hacia la felicidad, en pocas palabras el jazz/fusión.

Carlos: contrabajo, Pakete: congas, foto por Julio Bravo.
La tocada por la paz, efectuada en el pasado mes de septiembre en el Centro Universitario Cultural nos encantó con éste ensamble nacional que se encuentra dando a conocer su proyecto, ellos han estado en varios clubes famosos, en festivales del Distrito Federal y, en medios de difusión como el IMER y el programa de televisión El Tímpano, por mencionar algunos. Esperemos que el tiempo y la sociedad los coloque donde deben de estar, para que sus tocadas en el nombre en que se lleven a cabo, terminen infestadas de seguidores ávidos de escuchar su buena música.


Que sirva de reflexión que si no nos comprometemos a orientar nuestros oídos a lo reciente, a lo nacional, jamás seremos capaces de ser nosotros mismos. Visitemos más nuestra música, acudamos a los museos, consumamos arte.  

Rive: batería, foto por Julio Bravo.

lunes, 1 de octubre de 2012

Cultura es igual a arte, periodismo, pintura, cine etcétera.

El viaje de la palmera, foto por Julio Bravo.


Los de la calle, no son los olvidados. 


Por Julio Bravo. 

Las calamidades cansan, el silencio es incomodo, entonces de ahí brotan…, las palabras que no saben ser ni tantito musitadas, las imágenes que no tienen por qué censurar, lo que puede mirarse a través de los ojos de todos.


            Transparente, foto por Julio Bravo.
En el pasado mes de agosto, para ser exactos el día 23, en los homenajes realizados al gran fotógrafo Héctor García el “Pata de perro”, -en el día de su nacimiento-, una de sus más cercanas amigas Elena Poniatowska ofreció un retrato textual, con alegorías que bien construían al hombre, al artista de una lente inusual. Con sombras y luces dispares y primeros planos, reconocimos, entendimos la labor diaria de un ser que busca insistente congelar el suceso en una imagen. Que intenta y consigue que la obviedad, el vació de las cosas se transforme se regenere para finalmente ir todavía más allá de una llana visión. Las pericias son tantas, nada encarna mejor la profesión de un artista que, la paciencia, una de las virtudes que se domina muy poco. El dúo que formaron por un tiempo el fotógrafo y la periodista conjugaría como uno solo, por el relato que nos narraba Elena, podíamos entender que sus misiones fusionaban el genio, se divertían, jugaban y, en otras tan sólo trabajaban con seriedad, la complicidad otorgó acercarse a los más humildes a los otros. 


Foto de Héctor García.
Mi visita a la fundación Héctor García, me introdujo a dos mundos: al de la literatura por un lado y la fotografía por el otro. Repensé las dos, e inusualmente alejado o muy cercano, en las dos me encuentro y me siento feliz. El tiempo y la humanidad nos permiten que para este nuevo mundo, los que deseamos intervenir en él, tengamos más y más instrumentos para reinterpretarlo en sus millones de formas. Considero que en mi postura como escritor, mi campo aumenta junto con sus herramientas. Y no, no se trata de que por tener la facultad de congregar ideas y acertarlas en un plano en blanco, se pueda hablar y meterse en todo. Tampoco por haber ahorrado un tanto y hacerse de una cámara fotográfica puede uno jactarse de hacer noticia, nada de esto es así de fácil. Pero a qué sí, sí podemos comenzar a pensar en el nacimiento de un nuevo hombre de mundo, para ser más explícitos, un “hombre de cultura”. Para quienes luchan por conseguir una información autentica, bien expresada, realista y con mucha conciencia, deben visualizar a éste hombre y mujer que bien, puede cargar con su cámara réflex, con su celular inteligente -con un uso razonable-, como grabar audio y escribir un texto, que inmediatamente su información viaje por Internet. Con la mayor importancia de que ése hombre y mujer cuenten con un acervo cultural en su cerebro, hoy ya no se ve nada lejos.

Alegre Elena, foto por Julio Bravo.

El periodista Héctor Anaya afirmaría en su libro Hacerse de palabras en sus primeras páginas que, todo el periodismo debe de ser cultural, ya que el periodismo contiene ideas, pensamiento, hechos y demás cosas que precisan una acción que es obligación divulgarla. “… el periodismo se nutre de la cultura y requiere de personas cultas y preparadas, escritores que dominen el oficio de la palabra…” de eso nos habla Anaya. Apuesto por lo mismo, es de suma importancia hacerles ver a todos los individuos que necesitamos gente inmiscuida en casi todo, que sepa de ciencia de economía; de política e historia y mucho más, para entregar un suceso, una crítica; lo que sea, pero que aquello contenga trascendencia. También creo que así, ayudaremos fomentar nuevos lectores, que sabrán valorar la estética, sabrán además reconocer la mentira y la realidad, serán más críticos y continuaran pidiendo lo verdaderamente honesto.   


María, Héctor García jr, Elena, foto por Julio Bravo.

En todas la áreas puede practicarse el que un "hombre cultural" se aproxime.

El sueño de la cámara, foto por Julio Bravo.

lunes, 24 de septiembre de 2012

La realidad fue primero un sueño.

El baño de fuego, foto por Julio Bravo.




Imaginando que. 


Por Julio Bravo.


En cada esquina del techo se iban formando telarañas aún más grandes, la vieja pintura se botaba de la pared. El baño de la casa se auto-acondicionaba poco a poco; a ratos parecía que todo terminaría deshojándose, como cuando el fuego va tragando la fotografía, como cuando los cachitos de cenizas caen al suelo. Así se van desprendiendo los pedacitos de pintura, así, uno va imaginado que, aquellas arañas que viven en el techo, un día nos atacaran furiosas y ciclópeas, una gran invasión acabara con nosotros como seres diminutos. 

Nada es extraño para la imaginación, tenía yo siete años o menos, cuando el baño de mi hogar se convertía en el vehículo de mis sueños. Recuerdo que en ocasiones entraba en él con una pluma, para entonces ya era un aficionado a los videojuegos y, como buen jugador exigía más. Me sentaba en la taza y comenzaba a intuir imágenes, concentraba los ojos en los pedazos sin pintura, encontraba figuras de hombres musculosos, de castillos terroríficos. A veces sólo miraba a la sirena del cancel; la veía nadar. Casi dominaba la técnica de mis fantasías, la tecnología mejoraba ante mi vista, yo creí imaginar lo imposible. Una tarde, aburrido, fui al baño, apunté los nombres de los personajes que más me gustaban: Wolverine, Batman, Hulk, Spiderman, Spawn, Venom, etcétera. Forme una gran lista en la pared, decidí pues, enfrentarlos…, para los tres años siguientes mi idea se había vuelto realidad. En las maquinitas de la papelería más cercana, X-Men: Children of the atom desplazaba de su lugar imperial a Street Fighter II: Champion edition, mis ojos quedarían deslumbrados. La imaginación continua: mi insistente gusto por mezclar el refresco de cola con el jugo de un limón entero, en mis años de adolescencia finalmente tomó realidad, para el 2005 Coca-Cola decide crear Coca-Cola Limón. A través del tiempo, muchas de mis ilusiones se han cumplido. 


Todo esto me hace pensar que un fuerte deseo puede cumplirse, en el mundo de las ideas todo puede suceder, si lo hemos imaginado, lo más seguro es que algún día sea real. Por eso hoy quiero especular en que Hollywood o algún buen cineasta, realice una película basada en la vida y obra del escritor argentino Julio Cortázar. Para esto, he puesto mi visión en el actor Vincent Cassel  que en su pasada interpretación del psicoanalista contracultural Otto Gross  en el filme de Un método peligroso dirigida por David Cronenberg, la caracterización de Vincent me hizo creer que se parece mucho a Cortázar. Estuvé analizando varias fotos del escritor y del actor, y sí, existen entre sus rostros facciones similares, quizá con algunos detalles Vincent puede realizar un papel excelente, además es francés, -tiene una altura considerable aunque no suficiente, para lo gigante que era el cronopio Cortázar- sus actuaciones son muy limpias y artísticas, es sin duda un pertinente candidato, para que los amantes de la literatura de Cortázar logremos ser beneficiados. Ya vislumbro caminar a Vincent Cortázar por los callejones de Francia, ver como aquellos autonautas enamorados, surcaban la autopista que une a Marsella con París. La historia de Cortázar lo ofrece todo.


El niño atormentado, cuasi campesino; que de día su casa, le ofrecía un jardín para jugar a sus anchas con personajes y paisajes: gente a caballo y lecheros, comerciantes en carretas en un suburbio de Buenos Aires que no estaba pavimentado, que de noche lo atemorizaba por la escasa luz de los faroles y que las mamás de otros niños decían que delincuentes y enamorados pululaban en la oscuridad. El adolescente solitario rodeado de libros, precozmente escribiría una novela y poemas. Lo demás no es difícil imaginar, el Boom Latinoamericano, la edición famosa de Rayuela, un controvertido Cortázar que apoya la causa social, que trata de hermanarse con Cuba, Chile, la visita tan apremiante a Nicaragua. Sin olvidar al Julio enfermo y perseguido por la muerte, los últimos días en la cama de un hospital parisiense.

Esperemos que el tiempo de mi sueño, sepa cumplir muy bien y no tarde tanto, para poder ver en la pantalla de cine el rostro de un hombre que es todos los rostros.



viernes, 14 de septiembre de 2012

Pintamos nuestra casa.

Roa en acción, foto por Julio Bravo.





En los muros de un pueblo. 

 Julio Bravo



Todos somos dueños de nuestro tiempo, de nuestra ciudad. Frente a los decorados muros, mi mirada se congela; los rastros de la humanidad son huellas cromáticas, trazos y líneas. El juego de los rostros, de los símbolos; de aquel legado plasmado por las manos del artista. 

Antes de la caída del muro de Berlín, poetas y pintores decidieron re interpretarlo, lo cargaron de un lenguaje pictórico, le devolvieron la voz que un día sólo tuvo por medio de la dictadura de un tirano. Finalmente su voz decidió el derrumbe. Y no sólo los artistas tomaron al muro, también la gente común se unió; cada uno de ellos sumaron su esfuerzo, su creatividad; la libertad sorbió sus primeras bocanadas de alivio. El arte es un ente revolucionario por la única razón de evolución. La historia del mundo también es una historia de imágenes, siempre lo ha sido. Siempre la necesidad por enmarcar en la memoria del hombre el pasado, ha permitido que nuestro lenguaje gráfico permanezca, se transforme. Para culminar con la marca de lo que hemos sido.


Roa retocando, foto por Julio Bravo.

No está de más hacer una revisión de la magnitud que tiene el arte visual, de igual forma podemos preguntarnos ¿cuál es el fin?, ¿cuál la necesidad? Basta con tan sólo asomarnos a nuestro interior, muchas veces nuestros recuerdos únicamente son: imágenes, instantes de un momento fraccionado. Hoy tenemos un gran reto, cada día y a cada hora lidiamos con rostros familiares o desconocidos; con carteles publicitarios, comerciales de televisión e imágenes por Internet, etcétera. Entonces, entendemos que nadie puede escapar de lo visual; los muralistas mexicanos sabían de la fuerza de la pintura. Llevaron el arte a las calles, los sacaron de los museos para que los privilegiados fueran la ciudad entera. Porque los ojos del mundo no pueden estar ciegos. Me bota así una reflexión que estimo viene al caso y nos ayudaría a reformar la idea del poder visual. ¡Quién no ha visto tantas veces el rostro de Jesús o el Che, o las letras de The Beatles impresas en una playera! Quizá a algunos pocos les ha cambiado su vida. Las imágenes pueden ser utilizadas con cualquier objetivo. La segunda guerra mundial gozó de una propaganda hitleriana perfecta, la esvástica es recordada con temor para algunos, en la religión para otros, la cara de Juan Pablo segundo les genera una paz interna. El beneficio de una imagen es imparcial, debemos orientar las imágenes para crear conciencia, re-evolución para una libertad mental.

Roa y su serpiente, foto por Julio Bravo.

Considero que el grafiti es o puede ser el muralismo del siglo XXI, es por eso que éste tiene que ser revolucionado, manejar una crítica social mucho más concreta, jamás debe vacilar y siempre debe de ir más allá, sólo así, dejará una huella de concientización en el ser humano. Tampoco quiero decir que esto que menciono no exista, claro que lo hay, pero para la mayoría de la gente pasa a último termino, y lo digo porque en ocasiones la masa que no se encuentra dentro del grafiti, suele estigmatizarlo como pintas y rayones en la pared; como letras sin sentido y monos horribles, y no es así. En las filas de este arte urbano, existen artistas comprometidos con la cultura y la sociedad.

Por eso, aquel llamado me instigó a visitar el pasado festival de grafiti realizado en México: All city canvas, donde nueve artistas urbanos transformaron la cara muda y lisa de algunos edificios representativos de la urbe, lo mutaron con la expresiva imagen de sus ideas. En esa ocasión mi querida acompañante me apuntó: “sube al edificio donde está él y toma muchas fotos”, eso me provoco al instante, aquel empujón que me permitió obtener otro enfoque, y, después analicé, “eso vale la pena”; acaso no es cierto que el atreverse es una actitud que pocos tienen, porque para bien o para mal, aquellos atrevidos a realizar una difícil ó fácil empresa, nos han regalado un patrimonio imprescindible. Quién podría negar el gran valor de una fotografía, de un vídeo; de una obra artística que trasciende y quizá al verla nos llene de valor para afrontar la vida, la realidad misma.

Necesitamos pintar las fachadas de nuestra ciudad con un buen propósito, ya sea artístico, ideológico, contestatario. Colorear las paredes para hacerle saber a los demás que cuentan con nosotros, que hay en la imaginación de algunos un sueño para todos, que el arte sí libera, sí nos da esperanza. Aquí las imágenes hablan por si solas.
                       

jueves, 6 de septiembre de 2012

La fantástica realidad.

Temperamento por Gustavo Vilchis, foto por Julio Bravo.


La quimera pintada.

por  Julio Bravo

Cruzamos la avenida para llegar al teatro hidalgo, mientras caminábamos por los puestos ambulantes que ahí se ponen, decidimos comprar un jugo fresco de naranja; el calor era ya insoportable para esa hora del día. Nos detuvimos un instante. A veces entre las chácharas y las baratijas, siempre se puede encontrar lo valioso. Y así fue,- aún no logró explicarme algunas cosas-, pero de repente sentí esa necesidad de parar, me cuenta mi novia que actuaba muy raro ese día. Según ella dice: que yo le venía rascando su mano todo el tiempo, que durante el trayecto, trataba de dirigirla sin decir palabras, que le decía cada cinco minutos ya estamos cerca amor. No recuerdo nada, salvo que en el estupor del vagón del metro me quede dormido, y desperté justamente cuando salíamos de la estación Bellas Artes. Entonces ella me dijo “qué pasa cariño, ¿te sientes bien? Sí, claro le respondí ¡aquí está con lo que soñaba!, recuerdas lo que te conté: cuando soñé con un ingente ojo que sangraba ingrávido; era un ojo que tenía cuerpo de ave, chillaba tan horrible pues estaba enredado en un alambre de púas; atrás de él se encontraba el perfil de una bella doncella que nos se inmutaba siquiera por el sufrimiento de ese pájaro-ojo, como si ella no supiera o no sintiera nada. Míralo amor, es ésta la imagen de mi sueño. La realidad de mi quimera profunda se concretaba en la portada de un libro Ésos fueron los días lo compré y en ese momento supe a donde dirigirme.

Escalera al cielo por Gustavo Vilchis, Foto por Julio Bravo.




Vamos amor, vamos al encuentro con el asombro. Nos metimos al centro cultural José Martí y ahí se encontraba la exposición, esperándonos. El artista plástico Gustavo Vilchis presentaba su obra y quedamos maravillados.





En una entrevista de televisión Octavio Paz afirma que el poema habla por si solo, y la obra pictórica de Gustavo trabaja de la misma forma, nos comunica su mundo a través de las imágenes, entendemos qué en los sueños, igual somos un espejo, quizá más impreciso pero igual revelador. La fantasía de sus mundos de pronto se transforma en una biografía del artista, ya que podemos ver a simple vista sus gustos, sus ilusiones, sus influencias. Lo onírico toma realidad y la realidad toma el sueño, esa mezcla permite que el diálogo de la obra con el espectador sea generosa y nutritiva.

Homenaje a mis dos grandes maestros por Gustavo Vilchis, foto por Julio Bravo.

Los personajes de Gustavo pareciera que sueñan dentro del sueño… para seguir soñando, en una realidad fantástica que se expresa muy bien, pasa de lo surrealista al romanticismo y porque no a la ciencia ficción. En algunos cuadros podemos distinguir a la perfección los iconos literarios y, los gustos tanto musicales como de cine de Gustavo, por ejemplo: como no identificar a ése tiburón que causaría terror en los cines de toda Norteamérica, o a ese autor que diría tajantemente que  “Dios ha muerto”. En otros cuadros la magnitud de la obra nos remite a las emociones y la fuerza del ser, quisiéramos tener el temple de hierro de esa niña que aguarda con calma el quebrar de la ola, o estar precisamente ahí cuando el gigante dragón brota majestuoso del agua.

Filosofía por Gustavo Vilchis, foto por Julio Bravo.



Las sensaciones y la experiencia son muchas, no es difícil identificarse con la pintura de Gustavo que él mismo ha denominado: Alchilazismo contemporáneo.

El encuentro con el arte es parte de soñar, creer y convenir qué la vida no se entiende de otra forma, por eso cada día, ella y yo salimos a que el mundo nos sorprenda, nos incite a ser parte de lo que desea en realidad.  



Mundo interior por Gustavo Vilchis, foto por Julio Bravo.